Un poema para mi madre en su día

El Día de las Madres en Venezuela, como en muchos países, es el segundo domingo de mayo. Por ello, este 12 de mayo recuerdo con un poema a mi madre en su día. Sin embargo, creo que el día de una mamá son los 365 días del año.

El pasado domingo 5 de mayo se celebró aquí en España el Día de las Madres y fue un día de igual celebración y homenaje a esas mujeres, incomparable e irremplazable. Son mujeres que tienen como título honorífico: Mamá, quienes nos han cuidado, nos cuidan y nos cuidarán hasta el último día de su existencia.

Si eres hija o hijo es porque tienes una madre y debes darle gracias a Dios por ese regalo en tu vida. El amor de una madre es ese tipo de amor que describe la biblia en 1º de Corintios 13:4:

«El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta».

Versos amorosos para la madre

Consejo maternal

Ven para acá, me dijo dulcemente
mi madre cierto día,
(aún me parece que escucho en el ambiente
de su voz la celeste melodía).

Ven y dime qué causas tan extrañas
te arrancan esa lágrima, hijo mío,
que cuelga de tus trémulas pestañas
como gota cuajada de rocío.

Tú tienes una pena y me la ocultas:
¿no sabes que la madre más sencilla
sabe leer en el alma de sus hijos
como tú en la cartilla?

¿Quieres que te adivine lo que sientes?
Ven para acá, pilluelo,
que con un par de besos en la frente
disiparé las nubes de tu cielo.

Yo prorrumpí a llorar. Nada, le dije,
las causa de mis lágrimas ignoro;
pero de vez en cuando se me oprime
el corazón, y ¡lloro!…

Ella inclinó la frente pensativa,
se turbó su pupila,
y enjugando sus ojos y los míos,
me dijo más tranquila:

Llama siempre a tu madre cuando sufras
que vendrá muerta o viva:
si está en el mundo a compartir tus penas,
y si no, a consolarte desde arriba.

Y lo hago así cuando la suerte ruda
como hoy perturba de mi hogar la calma,
invoco el nombre de mi madre amada,
¡y entonces siento que se ensancha mi alma!

Con este poema del brasileño Olegario Víctor Andrade, EspaciosFemeninos.com expresa en su sección Rimando sentimientos la conexión profunda de las madres con el alma de sus hijos. Ese sentir que solo en versos podemos expresar mejor a ese ser especial.

Si te gusto envíaselo a tu madre o a una mamá que tu conozcas. Feliz día a todas las madres del mundo.

¿Quieres ver el rostro de Jesús?
Angélica Hernández @EspaciosFemeninos

Compartir:

Deja una respuesta